Bahía Drake es uno de los principales destinos turísticos de la Península de Osa y es la puerta de entrada al Parque Nacional Corcovado y la Isla del Caño. Desafortunadamente, la crisis de salud causada por la pandemia de COVID19 llevó el turismo internacional a un mínimo histórico. Si bien algunos otros destinos turísticos apostaron por el turismo local en el mediano plazo, la Península de Osa no fue un
destino favorecido por el sector nacional por su lejanía.
Muchas empresas cerraron y las comunidades locales empezaron a ver con desesperación su situación económica, instando a la población local a recurrir a la minería, la caza y la tala.
Desde abril de 2020, la Fundación Corcovado comenzó a implementar en las comunidades un proyecto de agricultura regenerativa para brindarle a estas personas seguridad alimentaria al plantar sus propios huertos en sus hogares o granjas.
«Nuestro programa ha tenido efectos extraordinarios en la comunidad; 45 familias están aplicando su capacitación en agricultura regenerativa a sus tierras. Han aprendido sobre suelos, preparación de camas de cultivo, fertilizantes orgánicos y repelentes, extracción y conservación de semillas y preparación de plántulas. Ahora están produciendo cultivos asombrosos, todos ellos libres de agroquímicos», indicó la organización en un comunicado de prensa.
El proyecto está creando una red / asociación o cooperativa de familias, compuesta especialmente por mujeres, para intercambiar semillas y cultivos y aunar esfuerzos en el procesamiento y comercialización de productos. De las 45 familias que han iniciado el proceso, al menos 40 de ellas están representadas por mujeres. Las mujeres están usando su tiempo en casa para implementar los proyectos y están trayendo comida extra para las familias y aprendiendo nuevas técnicas que les permiten explorar la producción y comercialización de productos.
En ese marco, se celebró el fin de semana anterior, el primer Festival de Semillas de Identidad en Bahía Drake.
UN FESTIVAL DE SEMILLAS:
El objetivo del festival es que las familias participantes del proyecto den a conocer estos conocimientos, prácticas y productos generados tras un proceso de capacitación en agricultura ecológica y regenerativa, además aspiramos a que los participantes den sus primeros pasos en la comercialización de productos, y que además del auto consumo, sus huertos puedan representar un ingreso adicional en sus hogares. Además en el festival se llevarán a cabo actividades artísticas, educativas, y venta y trueque de productos.