Como parte de su Plan de Alta Hospitalaria, y en medio de la pandemia por covid-19, el Hospital San Juan de Dios implementó la modalidad virtual para la capacitación de familiares y cuidadores de pacientes que serán egresados del centro médico.
Y es que el hospital no ha parado de atender pacientes de diversas patologías en medio de la emergencia que afronta el país. En promedio hay entre 250 y 300 pacientes no covid internados, se trata de personas que ingresan por infartos, problemas relacionados a la diabetes, hipertensión, cirugías de emergencia, pacientes oncológicos, entre otros.
La doctora Lorena Gamboa Vindas, subdirectora de Enfermería en Educación y Servicio, explicó que las enfermeras encargadas del Plan de Alta Hospitalaria identifican a usuarios con déficit de autocuidado o necesidades especiales de seguimiento y de esta forma elaboran un plan de acción para cuando el paciente regrese a su hogar.
«Esto principalmente en los casos que existe algún grado de dependencia, por ejemplo: heridas agudas y crónicas, sondas vesicales, sondas gástricas, ostomizados, traqueotomías, encamamiento prolongado, entre otros), esto abarca desde cuidados por parte de la familia, hasta atención primaria en su comunidad por parte del ebáis o la clínica» detalla Gamboa.
Debido a la pandemia los pacientes internados en el hospital no reciben visitas, esto dificulta la interacción del personal de enfermería con los cuidadores o familiares del paciente.
«Para continuar con el Plan de Alta Hospitalaria estamos localizando a la familia del paciente vía telefónica, por medio de correo electrónico les remitimos información sobre los cuidados básicos y les enviamos una invitación para una charla por medio de la plataforma Zoom. En 45 minutos interactuamos con todos los familiares que deseen conectarse dándoles capacitaciones en diferentes temas de acuerdo con el plan de cada paciente” explicó la subdirectora.
El Plan de Alta Hospitalaria del San Juan de Dios es un programa que inició en el año 2016, es un proceso que incorpora la aplicación de herramientas de enfermería para una valoración de las necesidades del paciente. Este plan contribuye a la disminución de reingresos y complicaciones en usuarios egresados, minimiza los eventos adversos secundarios a una situación de salud y fomenta el autocuidado de los usuarios y familiares.