El hospital Fernando Escalante Pradilla de Pérez Zeledón ha venido presentando aumento de casos de pacientes que venían contagiados de covid-19 desde sus hogares y comunidades dados los brotes que hay en los diferentes distritos del cantón.
Esta realidad provocó un brote en funcionarios infectados por el virus SARS-CoV-2 causante de la covid-19 lo que lleva a tomar decisiones por la seguridad de todas las personas incluyendo pacientes y colaboradores de los 30 servicios del establecimiento de salud.
La doctora Guiselle Guzmán Saborío, epidemióloga de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) se trasladó al hospital para apoyar y acompañar al establecimiento en estos momentos de brote.
“Los pacientes que han resultado confirmados se encuentran en aislamiento y bajo monitoreo médico estricto, recibiendo la mejor atención integral. Por otro lado, se continúa realizando una evaluación permanente de las medidas epidemiológicas y de prevención y control de infecciones intrahospitalarias para proteger a los pacientes y a los trabajadores de salud, para que puedan sentirse en un lugar seguro” Además, se está reforzando con medidas de bioseguridad, entre ellas la dotación de los equipos de protección personal que se requieren: mascarillas quirúrgicas, respiradores N95 o equivalentes, batas de bioseguridad, caretas entre otros” explicó la doctora Guzmán.
La doctora Joicy Solís Castro, directora general del centro médico, indicó que trabajan exhaustivamente para controlar el brote lo que conlleva a que solo emergencias calificadas se atienden en dicho centro médico.
“Estamos en una situación inusual, pero con la convicción de que pronto el hospital reanudará los servicios que ofrece a la población. Para no dejar los pacientes sin las atenciones nos apoyaremos en la red de prestación de servicios con los nosocomios periféricos San Vito, Manuel Mora Valverde de Golfito, Ciudad Neily yTomás Casas, también con el Monseñor Sanabria de Puntarenas y Max Terán Valls de Quepos” explicó Solís.
Por otra parte, el doctor Mario Felipe Ruiz Cubillo dijo que la CCSS ha venido reforzando ese centro médico con plazas en los diferentes servicios y se prevé la dotación de recurso humano y equipamiento para el laboratorio clínico, con el propósito de fortalecer el servicio de diagnóstico de covid-19 para toda la región Brunca.
El doctor Randall Álvarez Juárez, director general del Monseñor Sanabria aseguró su compromiso de ayudar en todo lo que sea necesario con el talento humano y equipo que dispone. Este centro apoyará con el procesamiento de muestras de funcionarios y pacientes.
“La Caja es una y es importante demostrar con hechos la solidaridad entre los establecimientos de la CCSS. He instruido a las jefaturas para que apoyen en todo lo que necesita la dirección médica del Escalante Pradilla” manifestó el doctor Álvarez.
Unidad Médica Móvil
La ingeniera Mónica Ingianna Mora, del Centro de Atención de Emergencias y Desastres (CAED) informó que para la semana del 14 de diciembre se iniciará con el traslado y armado de una Unidad Médica Móvil (UMM). La UMM «cuenta con tres módulos con capacidad para 20 camillas y equipo médico básico como monitores, esfignomanómetros, desfibriladores, electrocardiógrafos y otros dispositivos para ofrecer atenciones de calidad a los pacientes que lo requieren».
“La Unidad Médica cumple con los estándares de equipos médicos de emergencia de la Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS). Es autosuficiente en la dotación de agua y electricidad para garantizar el funcionamiento independiente del hospital”, explicó el ingeniero Manuel Ramírez Marchena, de la gerencia médica.
El hospital Escalante Pradilla tiene población adscrita de 145 mil personas y es centro de referencia en la zona sur de Costa Rica.