Este lunes, en conferencia de prensa, distintas autoridades del cantón de Pérez Zeledón hicieron un llamado de atención a la población ante el aumento de casos de COVID-19.
Una de las mayores preocupaciones es sin duda la situación del Hospital Dr. Fernando Escalante Pradilla, que se encuentra ya “al tope de su capacidad de ocupación”, según alertó el Director Regional del Ministerio de Salud, Cristian Valverde.
De hecho, el pasado 2 de diciembre se realizó un megatraslado de pacientes COVID-19 a hospitales de la Gran Área Metropolitana para descongestionar el centro médico.
Esto porque el hospital de Pérez Zeledón tiene una capacidad para atender a 15 pacientes con covid-19, sin embargo, se llegó a tener 39, por lo que fue necesario solicitar apoyo a otros centros médicos de la red de la Caja Costarricense del Seguro Social, según dio a conocer esta institución a través de un comunicado.
Al respecto, Valverde explicó que el Hospital Escalante Pradilla tiene ya la ocupación máxima en Cuidados Intensivos y que incluso, debió acondicionarse un salón adicional para la atención de personas con el virus.
Esto podría complicarse aún más durante Navidad y fin de año, si no se cumplen a cabalidad las medidas sanitarias, por la reactivación de actividades turísticas y el ingreso de mayores personas al cantón con fines comerciales (para realizar sus compras de regalos, por ejemplo) o para visitar familiares y amigos.
Además, la alerta se genera porque el recurso humano del Hospital Escalante Pradilla también se está viendo afectado. De hecho, hay más de 50 funcionarios de ese centro hospitalario y sus contactos que están en aislamiento por COVID-19.
Esta situación ha obligado a sustituir a todas esas personas y ya no hay capacidad para más sustituciones, especialmente cuando se trata de médicos especialistas o médicos generales, lo que impacta también la atención de pacientes con enfermedades crónicas u otras dolencias.
También el sistema de salud ha sufrido la muerte de personeros en toda la región.
De continuar esta situación, se vería seriamente comprometida la prestación de servicios hospitalarios y obligaría a tomar medidas más restrictivas a nivel cantonal.
Esto también preocupa por el impacto económico y social que podría acarrear para Pérez Zeledón, que hasta el día de hoy permanece en alerta amarilla, según indicó el alcalde Jeffrey Montoya.
Por esa razón, las autoridades aprovecharon para pedir a la población civil que atiendan las recomendaciones del Ministerio de Salud, respeten sus burbujas sociales, se laven las manos, usen mascarilla y alcohol en gel, y cuiden a las personas más vulnerables porque padecen factores de riesgo.
Finalmente, si bien no se anunciaron nuevos cierres o medidas el día de hoy, si se aclaró que el aumento de casos en el cantón es una de las consideraciones que se analizan a nivel nacional para designar la alerta naranja.
Además, el Dr. Valverde explicó que a nivel país ya superamos la primera ola de contagios y nos encontramos en una “especie de valle” antes de iniciar una segunda ola que no necesariamente tendrá el mismo comportamiento de la anterior, afectando posiblemente más a las regiones.