Por medio de lecciones no presenciales, la primera generación de estudiantes de todo el país inicia con el nuevo programa de Inglés Básico, para el desarrollo de competencias en dicho idioma, necesarias en un entorno laboral.
“Este esperado programa viene en un buen momento, por el gran impacto que estamos seguros que va a generar en la población nacional y el empresariado”, explica Vanessa Gibson, Directora de Clima de Inversión de CINDE.
Esta iniciativa se enmarca dentro de la Estrategia Nacional Alianza para el Bilingüismo y se suma al trabajo que viene realizando el INA para el fortalecimiento de la enseñanza del inglés, dentro de los cuales destacan: la reactivación en modalidad no presencial de los cursos que se venían impartiendo, lo cual permite que más de 2.921 personas continúen sus clases de inglés a pesar de las restricciones vigentes.
Además, más de 1000 personas han conseguido certificar su nivel de inglés mediante pruebas no presenciales. De manera complementaria, el cuerpo docente se ha certificado con pruebas internacionales para fortalecer aún más la calidad de la enseñanza en el idioma.
Para Roy Mena, Director de Asuntos Corporativos de Sykes y Presidente de la Cámara de Empresas de Servicios Corporativos de Alta Tecnología (CAMSCAT), “es muy relevante el que hayamos podido contribuir para que la institución diera este gran paso hacia la transformación que se requiere, no solamente de cara a la cuarta revolución industrial, sino porque un segundo idioma, y en este caso el inglés, es la llave que abre la puerta a las opciones laborales”.
Con este nuevo programa, las personas podrán certificarse en:
- Inglés básico (300 horas)
- Inglés intermedio (300 horas)
- Inglés intermedio-alto (600)
- Inglés avanzado (300 horas)
Esto permite generar capital humano con las habilidades lingüísticas precisas para ayudar al desarrollo de las organizaciones, dinamizar la economía y la atracción de inversión extranjera.
“Son un complemento en la oferta de nuestro país para que nuevas empresas nos vean como un destino estratégico, presentando además una oportunidad de crecimiento para aquellos que ya han seleccionado a Costa Rica para el desarrollo de sus operaciones”, comenta Alejandro Pignataro, presidente del Consejo de Promoción de la Competitividad (CPC).
Tras el inicio de estos nuevos programas, se activarán gradualmente próximas matrículas, buscando expandir esta importante respuesta a las necesidades de la población y del sector productivo para mantener en movimiento la dinámica económica y generar bienestar a las familias costarricenses.