Lentitud o negativa por parte de instituciones públicas para atender trámites; así como problemas asociados con el otorgamiento de subsidios económicos; y con el cobro del servicio de agua potable; son algunas de las situaciones que más denunciaron las mujeres que residen fuera del Gran Área Metropolitana, en lo que va de este año 2020.
Según estadísticas de la Defensoría de los Habitantes, al 30 de setiembre del 2020, un total de 6929 mujeres rurales solicitaron la intervención de la institución; cifras que demuestran la vulnerabilidad a la que se enfrentan estas mujeres en el goce de sus derechos.
Es por ello que en el marco del Día Internacional de las Mujeres Rurales, la Defensoría de los Habitantes hizo eco al llamado de las Naciones Unidas para crear conciencia sobre las luchas de estas mujeres, sus necesidades, y su papel fundamental y clave en nuestra sociedad; especialmente a raíz del COVID-19.
La pandemia está profundizando las desigualdades preexistentes que viven cotidianamente las mujeres. Por la baja ocupación y el desempleo, las mujeres tienen problemas para satisfacer las necesidades alimenticias de las personas dependientes, pago de servicios básicos y de alquiler; así como la educación de sus hijos e hijas, en tiempos en que es primordial el acceso a la tecnología.
Esta situación se agrava aún más en las zonas rurales.
Como bien lo ha señalado la Defensoría, Costa Rica debe seguir avanzado en la igualdad de oportunidades para las mujeres, que permitan no sólo insertarse en lo mundo de lo laboral, sino además permanecer y desarrollarse.
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