Como máximo, será en el primer bimestre de este 2021 que los vecinos de General Viejo y de las comunidades cercanas estrenen el nuevo puente sobre el río General, en Pérez Zeledón.
Al finalizar este año, el proyecto registra un avance del 63%, tras superar inconvenientes derivados de las crecidas del río y retrasos en la importación desde Austria de las piezas del puente, producto de las distorsiones generadas por el Covid-19 en el tránsito marítimo.
La estructura metálica ya fue colocada a lo largo de los 121.5 metros de longitud que tendrá el puente.
Según explicó Mario Rodríguez, director ejecutivo del Consejo Nacional de Vialidad (CONAVI), si bien falta cerca de un 37% de los trabajos, las fases que se avecinan para este mes de enero y febrero son más rápidas de ejecutar, que las etapas previas de cimentación y armado de la estructura.
Adicionalmente, la consolidación del verano reducirá las interrupciones del proceso constructivo por crecidas del río.
Los principales trabajos pendientes son la colocación del piso en losas de concreto, el asfaltado del puente sobre esas losas y las aproximaciones, que son las que unen el puente con la carretera a ambos lados.
El nuevo puente sobre la 321 contará con una pasarela peatonal que permitirá a los vecinos transitar con mayor seguridad.
Tanto el presidente de la República, Carlos Alvarado, como el ministro de Obras Públicas y Transportes, Rodolfo Méndez Mata, se habían comprometido con los vecinos del lugar a construir el puente -que colapsó a raíz de la tormenta tropical Nate, en noviembre de 2017-, el cual vendrá a resolver por 50 años los problemas de crecidas del río y el tránsito por el lugar.
La obra tendrá un costo de ¢3.589 millones, aportados por la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) al Consejo Nacional de Vialidad (CONAVI).
Detalles del proyecto. La estructura es de cerchas de acero galvanizado y está conformada por 27 módulos, de 4.5 metros de longitud cada uno. Sobre ellos, se colocará una losa de concreto de 8 metros de ancho.
Cada carril, de los dos disponibles, tendrá 3.68 metros de ancho y la carpeta asfáltica sobre la losa de concreto, que servirá de superficie de ruedo, será de 5 cm de espesor.
El paso se ubicará a pocos metros de donde se encontraba el antiguo puente.
Asimismo, con el propósito de beneficiar a tantas personas que pasan a pie por la zona, se contará con una acera de 1.5 metros de ancho, adosada de forma externa a la cercha, con barandas peatonales y piso de acero.
Por el sitio circulaban unos 4.000 vehículos al día hasta el momento del colapso del antiguo puente. Las comunidades de General Viejo, Los Chiles, El Carmen, Santa Margarita, Rivas y Barrio Sinaí, así como Peñas Blancas y Barrio los Pinos, entre otras, serán algunas de las beneficiadas de este proyecto.