La semana pasada, durante Connect, la conferencia virtual de Facebook, su fundador Mark Zuckerberg anunció el cambio de nombre de Facebook a Meta.
Aunque las aplicaciones que desarrolla la empresa sí mantendrán su nombre. Entre ellas, Facebook (la red social), Instagram y Whatsapp.
Pero ¿por qué cambiaron de nombre a la empresa matriz?
Como señal del nuevo enfoque de la compañía, que se especializará en desarrollar una especie de universo virtual o meta universo.
Se trata de una dimensión paralela o juego de video inmersivo donde las personas podrán hacer ejercicio, trabajar, ir a conciertos, jugar, crear y muchas cosas más. Incluso, vender y comprar bienes. Con esto, esperan a traer a los más jóvenes.
“Es como si estuvieras realmente allí con otra persona o en otro lugar”, aseguró Zuckerberg en su carta pública del 2021. “En este futuro, podrás teletransportarte instantáneamente como un holograma para estar en la oficina sin tener que desplazarte, en un concierto con amigos o en la sala de tus padres para ponerte al día. Esto abrirá más oportunidades sin importar dónde vivas. Podrás dedicar más tiempo a lo que te importa, reducir el tiempo en el tráfico y tu huella de carbono”.
Probablemente, para ingresar a ese metaverso se necesitará un casco de realidad virtual o gafas de realidad aumentada.
En ese metaverso, se interactuará a través de avatares, representaciones humanas tridimensionales de cada usuario que se pueden personalizar y serán capaces de reproducir gestos y expresiones faciales, según indicaron los medios internacionales.
Pero, ¿cuándo estará listo el metaverso de Facebook?
Aún no tienen fecha definida para su lanzamiento. Ciertos expertos hablan de que pasará de entre 5 a 10 años para ver el metaverso hecho realidad.
Incluso, Zuckerberg aseguró que es un proyecto a largo plazo, y que su desarrollo dependerá de un hardware específico diseñado para él.
Además, la empresa trabaja en dispositivos, interfaces y otras plataformas que serán compatibles con este universo virtual para que las personas pueden ingresar a él y tener “la vida que siempre soñaron”.